Un respiro

El juego visual va perdiendo intensidad a medida que la distancia mengua. A pesar de ello, lo que guarda en su interior apenas si merece la pena: no llega a interesarnos demasiado. Aunque su piel, en cambio, justifica toda la violencia injustificable de la mañana, toda su malicia.
Después, cuando dejamos a un lado el camino, escribimos cosas como éstas:
He visto noticias como puntos magnéticos, árboles dispuestos a la vida sin necesidad de palabras.
El verde era tan intenso que permanecía mudo, jugando con la luz, acariciando el aire.
Como si algunas cosas tuvieran en sí mismas propiedades curativas, una savia exterior o una evidencia.
Como si este vivir a su lado, intentando comprender, significara mucho más de lo que nunca imaginamos.
FUNDAMENTO:
En arte es difícil decir algo que sea tan bueno como no decir nada.
Ludwig Wittgenstein.
Por cierto, voy a tomarme un respiro.
3 comentarios
pini, la jardinera -
para tinta, tinta completa.
tráeme la pala, ayúdame a hacer un pozo grande.
vamos a desmenuzar la tierra, mezclarla con un poco de abono, algo de arena.
el tutor se pone primero, luego, sin romper el pan colocaremos con cuidado el arbolito.
uno lo tiene, y el otro va tirándole tierra encima.
ya está.
ahora la pisamos bien para que quede firme, y sujetamos el eje central al tutor.
un poco de agua para que no sufra tanto el transplante.
en un par de años dará sombra suficiente.
buenos días, su señoría.
Enrique -
pini -
qué ganas tengo!
y cuando lo pienso, sólo me imagino caminando bajo los naranjos, o metiendo mano en la tierra.
se me está pasando el invierno sin plantar un árbol.